Esta mañana, en el programa “Buenos Días Región” de Polar Comunicaciones, la Coordinadora de Sostenibilidad y Redes de Fundación Presente, Josefina Montt, abordó las preocupantes cifras que posicionan a Magallanes como la región con peor asistencia escolar del país durante 2025. De acuerdo al Reporte Nacional de Asistencia y Ausentismo Escolar (marzo-julio 2025), elaborado por Fundación Presente a partir de datos del Ministerio de Educación, la región registró una asistencia promedio de 76,8%, muy por debajo del promedio nacional de 88,1%, y lejos de la Región del Maule, que lidera con 90,7%. Durante la entrevista, Montt explicó que el problema en Magallanes no es solo coyuntural, sino sostenido en el tiempo. “Solo en dos de los cinco meses analizados —mayo y junio— la asistencia logró superar levemente los niveles del mismo mes del año anterior”, detalló, destacando la gravedad del fenómeno. El informe también reveló que en 2024, el 57,3% de los estudiantes de la región terminó el año con ausentismo crónico, cifra que en el periodo marzo-julio de 2025 se disparó a 73,1%, la más alta del país. El ausentismo crónico se define como faltar el 10% o más de los días de clases, es decir, más de 20 días en el año, lo que según Fundación Presente está asociado a menores aprendizajes, debilitamiento de la motivación escolar y mayores probabilidades de deserción. El panorama refleja un retroceso significativo respecto al periodo pre-pandemia. En 2019, la asistencia promedio en Magallanes superaba el 90%, mientras que hoy alcanza apenas un 76,8%, lo que representa una pérdida de más de 13 puntos en cinco años. Frente a este escenario, Fundación Presente recomienda fortalecer el monitoreo de asistencia con información en tiempo real, asegurar condiciones de transporte y apoyo logístico considerando las particularidades geográficas y climáticas de la región, y desarrollar campañas locales que refuercen el valor de la asistencia cotidiana como derecho y deber educativo.
De acuerdo al último Reporte Nacional de Asistencia y Ausentismo Escolar (marzo-julio 2025), elaborado por Fundación Presente a partir de datos del Ministerio de Educación, la Región de Magallanes presenta la situación más crítica de Chile en materia de asistencia escolar. Mientras la asistencia promedio nacional alcanzó un 88,1% Magallanes llegó a tan solo 76,8%, muy por debajo de la región del Maule, que lidera con 90,7%. “La brecha de Magallanes con respecto a Maule es de más de 14 puntos. Esto significa que los estudiantes magallánicos enfrentan desventajas significativas para aprender y proyectarse a futuro”, señala Rebeca Molina, directora ejecutiva de Fundación Presente, organización que desde hace 11 años trabaja para combatir el ausentismo en Chile. Por otro lado, solo en 2 de los 5 meses (mayo y junio) analizados, la asistencia de Magallanes logró superar levemente los niveles del mismo mes del año anterior, lo que evidencia que el problema no es solo coyuntural, sino sostenido en el tiempo. Francisca Vogt, directora ejecutiva de Fundación Teraike, advierte que “estas cifras no incluyen los días en que hubo paro o cuando hay situaciones climáticas, como cuando se congelan las cañerías. Esos días sin clases no se consideran como inasistencia, por lo que la situación real es aún más grave. Si no logramos que los niños y niñas asistan regularmente a la escuela estamos comprometiendo no solo sus aprendizajes, sino también su futuro y el desarrollo de la región”. Ausentismo reiterado y en alza En 2024, el 57,3% de los estudiantes de la región terminó el año con ausentismo crónico, frente al 43,1% nacional. En el periodo maro-julio 2025, esta cifra se disparó a 73,1%, la más alta registrada en nuestro país. El ausentismo crónico -faltar el 10% o más de los días de clases, es decir, más de 20 días en el año- está asociado a menores aprendizajes, debilitamiento de la motivación escolar y mayores probabilidades de deserción. “Que más de la mitad de los estudiantes de Magallanes esté en situación de ausentismo crónico es alarmante. Urge un plan regional que aborde las barreras estructurales y culturales que afectan la asistencia”, enfatiza Molina. Un retroceso respecto al periodo pre-pandemia En 2019, la asistencia promedio en Magallanes superaba el 90%. Hoy alcanza apenas un 76,8%, es decir, una pérdida de más de 13 puntos en cinco años. Si bien a nivel nacional aún no se recuperan los niveles pre-pandemia, el rezago de Magallanes es mucho más pronunciado. ¿Cómo revertir la tendencia? Fundación Presente recomienda medidas como: Fortalecer el monitoreo de asistencia con información en tiempo real. Asegurar condiciones de transporte y apoyo logístico en una región con fuertes particularidades geográficas y climáticas. Desarrollar campañas locales que refuercen el valor de la asistencia cotidiana como derecho y deber educativo. “Magallanes tiene la oportunidad de revertir esta tendencia en el segundo semestre si las comunidades educativas, las familias y las autoridades ponen la asistencia escolar en el centro de las prioridades”, concluye Molina. Por su parte, desde la región, Francisca Vogt agrega: “Magallanes enfrenta un desafío enorme, pero también tiene una oportunidad: si tomamos consciencia de esta brecha y trabajamos unidos, podemos cambiar la tendencia y asegurar que los niños y niñas de nuestra región desarrollen todo su potencial”.
Esta mañana, en el programa “Buenos Días Región” de Polar Comunicaciones, la Coordinadora de Sostenibilidad y Redes de Fundación Presente, Josefina Montt, abordó las preocupantes cifras que posicionan a Magallanes como la región con peor asistencia escolar del país durante 2025. De acuerdo al Reporte Nacional de Asistencia y Ausentismo Escolar (marzo-julio 2025), elaborado por Fundación Presente a partir de datos del Ministerio de Educación, la región registró una asistencia promedio de 76,8%, muy por debajo del promedio nacional de 88,1%, y lejos de la Región del Maule, que lidera con 90,7%. Durante la entrevista, Montt explicó que el problema en Magallanes no es solo coyuntural, sino sostenido en el tiempo. “Solo en dos de los cinco meses analizados —mayo y junio— la asistencia logró superar levemente los niveles del mismo mes del año anterior”, detalló, destacando la gravedad del fenómeno. El informe también reveló que en 2024, el 57,3% de los estudiantes de la región terminó el año con ausentismo crónico, cifra que en el periodo marzo-julio de 2025 se disparó a 73,1%, la más alta del país. El ausentismo crónico se define como faltar el 10% o más de los días de clases, es decir, más de 20 días en el año, lo que según Fundación Presente está asociado a menores aprendizajes, debilitamiento de la motivación escolar y mayores probabilidades de deserción. El panorama refleja un retroceso significativo respecto al periodo pre-pandemia. En 2019, la asistencia promedio en Magallanes superaba el 90%, mientras que hoy alcanza apenas un 76,8%, lo que representa una pérdida de más de 13 puntos en cinco años. Frente a este escenario, Fundación Presente recomienda fortalecer el monitoreo de asistencia con información en tiempo real, asegurar condiciones de transporte y apoyo logístico considerando las particularidades geográficas y climáticas de la región, y desarrollar campañas locales que refuercen el valor de la asistencia cotidiana como derecho y deber educativo.
De acuerdo al último Reporte Nacional de Asistencia y Ausentismo Escolar (marzo-julio 2025), elaborado por Fundación Presente a partir de datos del Ministerio de Educación, la Región de Magallanes presenta la situación más crítica de Chile en materia de asistencia escolar. Mientras la asistencia promedio nacional alcanzó un 88,1% Magallanes llegó a tan solo 76,8%, muy por debajo de la región del Maule, que lidera con 90,7%. “La brecha de Magallanes con respecto a Maule es de más de 14 puntos. Esto significa que los estudiantes magallánicos enfrentan desventajas significativas para aprender y proyectarse a futuro”, señala Rebeca Molina, directora ejecutiva de Fundación Presente, organización que desde hace 11 años trabaja para combatir el ausentismo en Chile. Por otro lado, solo en 2 de los 5 meses (mayo y junio) analizados, la asistencia de Magallanes logró superar levemente los niveles del mismo mes del año anterior, lo que evidencia que el problema no es solo coyuntural, sino sostenido en el tiempo. Francisca Vogt, directora ejecutiva de Fundación Teraike, advierte que “estas cifras no incluyen los días en que hubo paro o cuando hay situaciones climáticas, como cuando se congelan las cañerías. Esos días sin clases no se consideran como inasistencia, por lo que la situación real es aún más grave. Si no logramos que los niños y niñas asistan regularmente a la escuela estamos comprometiendo no solo sus aprendizajes, sino también su futuro y el desarrollo de la región”. Ausentismo reiterado y en alza En 2024, el 57,3% de los estudiantes de la región terminó el año con ausentismo crónico, frente al 43,1% nacional. En el periodo maro-julio 2025, esta cifra se disparó a 73,1%, la más alta registrada en nuestro país. El ausentismo crónico -faltar el 10% o más de los días de clases, es decir, más de 20 días en el año- está asociado a menores aprendizajes, debilitamiento de la motivación escolar y mayores probabilidades de deserción. “Que más de la mitad de los estudiantes de Magallanes esté en situación de ausentismo crónico es alarmante. Urge un plan regional que aborde las barreras estructurales y culturales que afectan la asistencia”, enfatiza Molina. Un retroceso respecto al periodo pre-pandemia En 2019, la asistencia promedio en Magallanes superaba el 90%. Hoy alcanza apenas un 76,8%, es decir, una pérdida de más de 13 puntos en cinco años. Si bien a nivel nacional aún no se recuperan los niveles pre-pandemia, el rezago de Magallanes es mucho más pronunciado. ¿Cómo revertir la tendencia? Fundación Presente recomienda medidas como: Fortalecer el monitoreo de asistencia con información en tiempo real. Asegurar condiciones de transporte y apoyo logístico en una región con fuertes particularidades geográficas y climáticas. Desarrollar campañas locales que refuercen el valor de la asistencia cotidiana como derecho y deber educativo. “Magallanes tiene la oportunidad de revertir esta tendencia en el segundo semestre si las comunidades educativas, las familias y las autoridades ponen la asistencia escolar en el centro de las prioridades”, concluye Molina. Por su parte, desde la región, Francisca Vogt agrega: “Magallanes enfrenta un desafío enorme, pero también tiene una oportunidad: si tomamos consciencia de esta brecha y trabajamos unidos, podemos cambiar la tendencia y asegurar que los niños y niñas de nuestra región desarrollen todo su potencial”.