7 de septiembre de 2017
Este día, comienza a operar la planta de destilación de Manantiales, primera refinería de hidrocarburos instalada en Chile.
La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) llevaba dos años de existencia y la actividad extractiva siete, desde que fluyó
Esta refinería tuvo como objetivos estabilizar y fraccionar el petróleo, recuperar hidrocarburos livianos y mantener la presión de los yacimientos reinyectando gas seco. Estaba diseñada para refinar cien metros cúbicos de petróleo y para tratar 800 mil metros cúbicos de gas diariamente. Luego su capacidad de destilación fue duplicada.
Esta planta funcionó hasta abril de 1978, abasteciendo la demanda regional de nafta, gas oil y kerosene, además de gas licuado para consumo doméstico.
En 1962, se inauguró la planta de tratamiento de gas en la localidad de Cullen, cuya capacidad alcanzó a procesar 2.800.000 metros cúbicos de gas por día y producir gas licuado.
En las décadas siguientes, se construyeron oleoductos y nuevas terminales para recibir la producción proveniente de Magallanes; que se vio nutrida, en los años sesenta, con el aporte de la primera plataforma marina de perforación en el estrecho.
ENAP construyó puertos de embarque, kilómetros de caminos y una red de oleoductos, gasoductos y poliductos. También contribuyó con el desarrollo de las localidades de Cerro Sombrero y Cullen, en la isla Grande, y de Posesión y Gregorio, en el continente.
Los yacimientos hidrocarburíferos desarrollados en Chile están concentrados en la Cuenca de Magallanes, donde existen tres distritos: uno sobre el continente, otro en el norte de la isla Grande y el tercer distrito se encuentra costa afuera; de donde proviene la mayor producción de petróleo crudo y gas natural. Estos yacimientos fueron desarrollados a partir de los años ochenta.
No obstante, la producción petrolera ha caído en forma significativa en los últimos años, pasando de 2.401 metros cúbicos en 1981 a 148 metros cúbicos en 2007, constituyendo una preocupación notable para las autoridades económicas.
A marzo de 2011, Chile produce sólo el uno por ciento del total del petróleo que necesita para cubrir sus necesidades energéticas, y tiene una dependencia absoluta de las importaciones de hidrocarburos para sostener su actividad productiva y abastecer al consumo.
Este proyecto beneficia a 14 familias acreditadas en el Informe Valech, marcando un hito de reparación y justicia en la región de Magallanes y de la Antártica Chilena.
Este proyecto beneficia a 14 familias acreditadas en el Informe Valech, marcando un hito de reparación y justicia en la región de Magallanes y de la Antártica Chilena.