14 de agosto de 2024
Con el objetivo de potenciar la investigación en esta materia y aportar a la descarbonización del país, la Universidad de Talca inauguró un equipo único en Latinoamérica denominado Evaluator C1000-LT, que permite la monitorización y caracterización de pilas de combustible de hidrógeno, dispositivo fundamental para avanzar en el desarrollo de tecnologías relacionadas.
Junto con el equipo principal, se presentaron una serie de otros aparatos que aportan a la investigación sobre hidrógeno, todos ellos financiados con fondos concursables de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID): Fondecyt, Fondequip y Desafíos Públicos, entre otros, a los que se suman aportes propios de la UTalca.
Durante la ceremonia realizada en el Campus Curicó para inaugurar los dispositivos, la ministra de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Aisén Etcheverry Escudero, recalcó que hoy los desafíos en el mundo frente al cambio climático han establecido metas ambiciosas en cuanto a descarbonización. «Eso supone cambiar la forma en cómo consumimos energía, cómo generamos energía y cómo desarrollamos nuestra industria», detalló.
En esa línea, destacó la importancia de potenciar la investigación desde las universidades. «El equipamiento que se está inaugurando hoy es muy importante, ya que hace parte de una estrategia mayor y nos permite generar investigación desde el Maule para el mundo», afirmó.
En tanto, el rector Carlos Torres Fuchslocher, subrayó que para la universidad es un desafío y un compromiso aportar en estas áreas tecnológicas, que hoy la posiciona en la vanguardia en investigación sobre la producción y uso eficiente de este elemento.
«El hidrógeno verde tiene una particularidad, que llega a lugares donde otras tecnologías sensibles no llegan, y en ese sentido, el desarrollo de las pilas de combustible son la tecnología que hoy se ha impuesto como la solución para poder abordar, por ejemplo, el transporte marítimo, carga pesada, entre otros», explicó la autoridad.
El rector subrayó que «hay diversos desafíos y cuando los problemas son grandes tienen que abordarse a partir de un trabajo transdisciplinario».
Cabe mencionar que el hidrógeno es el elemento más abundante en el universo y puede obtenerse a través de fuentes renovables. En la actualidad se produce principalmente desde el gas natural, petróleo y carbón, generando emisiones de CO2, sin embargo, también puede obtenerse mediante la electrólisis, que consiste en separar el hidrógeno y el oxígeno del agua, utilizando energía eléctrica, si esta proviene de energías renovables, se les denomina hidrógeno verde.
Por su parte, el director del proyecto y académico de la Escuela de Ingeniería Civil Eléctrica, Carlos Restrepo Patiño, destacó las posibilidades que se abren en materia de desarrollo de estas tecnologías.
«Estamos emocionados con el equipo que estamos inaugurando, ya que, nos permitirá hacer investigación de punta en pilas de combustible, y básicamente, buscar entender cómo los procesos de gestión de energía limitan el tiempo de vida de las pilas, que es un problema que tienen hoy para comercializarse de forma más masiva», planteó.
Movilidad verde
Tras la ceremonia las autoridades visitaron el Laboratorio de Aplicaciones en Redes Inteligentes (LARI) de la Facultad de Ingeniería, donde se encuentra el equipamiento. Junto con esto, para demostrar las aplicaciones prácticas de la investigación, se realizó una demostración con un scooter que se desplaza con pilas de hidrógeno cargadas con los nuevos equipos.
La ministra se desplazó con el scooter por el campus Curicó y valoró el desarrollo científico tecnológico que evidencia la UTalca.
«Necesitamos universidades fortalecidas, conectadas con su entorno, pero con grandes ambiciones como lo hemos visto aquí», enfatizó Etcheverry.
«Por qué no soñar que desde la UTalca y desde este campus aparezcan las próximas startups de hidrógeno verde que resuelvan muchos de los desafíos de la industria global, no esperamos nada menos», finalizó la ministra de Ciencia.
Fuente: utalca.cl
En el fallo, la magistrada Claudia Ortiz Quinteros ordenó a la empresa pagar una indemnización de $90.000.000 a los demandantes, tras establecer que no adoptó las medidas necesarias para proteger la vida y salud del trabajador fallecido.
En el fallo, la magistrada Claudia Ortiz Quinteros ordenó a la empresa pagar una indemnización de $90.000.000 a los demandantes, tras establecer que no adoptó las medidas necesarias para proteger la vida y salud del trabajador fallecido.