Un punto de inflexión. En eso, según reconocen distintos dirigentes del oficialismo, se planea convertir la segunda cuenta pública del Presidente Gabriel Boric, que se realizará el próximo jueves 1 de junio. La idea, según cuentan, es hacer un esfuerzo por marcar un nuevo » tiempo” del gobierno y dar por superados los contratiempos del primer año de administración.

En consideración de la relevancia que tiene para el Ejecutivo este evento, el tema se tomó el comité político ampliado del lunes en La Moneda. Si bien los ánimos no eran los mejores -debido a los dichos de Natalia Piergentili, que tildó de “monos peludos” al electorado del gobierno-, luego de que ella reiterara su arrepentimiento, la reunión se abocó a adelantar algunos detalles de la puesta en escena que planean en Palacio para el primer día de junio.

Además de Piergentili, en el comité político estuvieron presentes el diputado Tomás Hirsch (presidente de Acción Humanista), y los timoneles Juan Carlos Urzúa (Partido Liberal) y Marco Velarde (Comunes), tal como lo definieron en una breve reunión oficialista realizada el viernes pasado. En representación del Ejecutivo, se sumaron los ministros Álvaro Elizalde (Segpres), Carolina Tohá (Interior), Camila Vallejo (Segegob) y Antonia Orellana (Mujer y Equidad de Género).

Al interior del comité, según cuentan asistentes, no se dieron detalles concretos sobre los anuncios o temas que se abordarán en la cuenta pública, pero sí que estará centrada en las medidas del primer año, especialmente aquellas de “carácter ciudadano”.

En este sentido, Urzúa comenta que la rendición del Presidente “tendrá mucho énfasis en resolver los problemas de las personas, la idea es que sea una cuenta pública ciudadana, con orientación en las necesidades y urgencias de las personas”. En esa misma línea, el timonel de los radicales, Leonardo Cubillos, manifestó que espera que el hito “más que números y porcentajes de alta estadística, le llegue y haga sentido a la gente”.

Otros de los asistentes al comité confirman que en la instancia se les explicitó que la idea es que la rendición de cuentas ante el Congreso se convierta en un punto de inflexión para el gobierno. “Creemos que va a ser un punto de inflexión importante para este segundo tiempo. Esa es la postura común”, sostiene Urzúa.

Esto en un contexto en que los partidos del oficialismo han tenido diferentes diagnósticos tras la derrota electoral del sector en las pasadas elecciones constituyentes.

Así, algunos han apostado por moderar el programa de gobierno, mientras que otros han apelado a defenderlo con más fuerza. Por ejemplo, la vicepresidenta de CS, Ximena Peralta, el sábado en entrevista con La Tercera, señaló que “para evitar que se consolide una mayoría conservadora, no podemos desdibujarnos ni abandonar nuestro programa”.

Instrucciones para los partidos

Además, el timonel liberal contó que la ministra Tohá adelantó que se busca preparar a los partidos sobre los anuncios que se harán el 1 de junio, de manera que puedan responder de forma ordenada. “Lo que pretendemos como coalición es empezar a tener vocerías únicas, así sean muchos interlocutores, pero un solo mensaje, todos juntos, alineados detrás del Presidente”, sostuvo.

En ese sentido, además, Cubillos manifestó que “como partido hemos solicitado que se nos puedan adelantar los énfasis que remarcará el Presidente, a fin de tener una visión holística de lo que será su segunda cuenta anual”.

En consideración del rol que pretenden tener los partidos, desde algunos de ellos adelantan que probablemente este viernes, en la reunión de la alianza, retomen las conversaciones sobre cómo afrontarán la cuenta pública.

Los secretarios generales harán lo propio en un encuentro que agendaron para este martes a las 11.00 en la sede del PS. Se espera que a dicho encuentro, en representación del PPD, llegue José Toro Kemp, quien no ha asistido a estas reuniones desde que ratificaron la opción de competir en una segunda lista en la elección de consejeros constituyentes.

“No queremos listas de supermercados”

Hora y media antes del comité político, entre los partidos de gobierno -a excepción del PPD, el Partido Comunista y Revolución Democrática– se reunieron en la sede de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS). Ahí, según presentes, se acordó no hacer solicitudes por la prensa sobre lo que cada partido espera de la cuenta pública.

En lugar de eso, sostienen las mismas fuentes, han enfatizado que deben alinearse con lo que anuncie el Presidente Boric. “No vamos a hacer una lista de pedidos, sino que vamos a alinearnos detrás del mensaje del Presidente”, añadió Urzúa.

“Queremos respetar la total autonomía y facultad del Presidente de definir cuáles son los temas que debe incorporar y resaltar respecto de lo que se ha hecho, y priorizar respecto a lo que viene. De ninguna manera (…) queremos pautear al gobierno y al Presidente (…). No queremos ir con una lista de supermercado de cada uno de los partidos, haciendo lobby con sus propios temas de interés”, afirmó, por su parte, el diputado Hirsch.

En consideración de que algunos diputados del Frente Amplio han solicitado una reunión con el Mandatario de cara al hito en el Congreso, Hirsch, además, aseguró que en el comité político se les planteó a los ministros que “es muy importante que la interlocución respecto de la cuenta sea con los presidentes de los partidos y no con las bancadas parlamentarias, puesto que de esa manera podemos tener un vínculo institucional”.

Fuente: latercera.com