15 de febrero de 2013
En muchas sociedades del África Occidental, hablar del amor es un tema tabú. Allí, se ama a puertas cerradas y en la intimidad del hogar. Y el romanticismo se relega a rangos femeninos y los hombres huyen de las demostraciones ñoñas. Consideran la sensibilidad como cosa de blancos y embebidos de machismo, los hombres de esta parte de África, parecen alérgicos al romanticismo tal como lo conocen los europeos: sentimiento generoso y soñador, con fantasías, regalos, demostraciones y gritos contra el viento
Allí, para demostrar su amor, los hombres hacen regalos estrafalarios y grandiosos, pasando de poemas y de suspiros y las mujeres hacen sacrificios desmedidos. Pero siempre, como en todas las culturas hay una minoría de hombres que sí gritan su amor y cantan canciones que hacen soñar y muchas veces llorar
Canciones que hablan del amor de un hombre con una sola mujer, del amor que acorta las distancias y del dolor de no tener al lado a la persona querida. Canciones de luchas de príncipes por una plebeya, versos de letanía que hablan del desamor y sin olvidar aquellas melodías de aquel cantautor que cantaba a su inalcanzable Mebame.
«…Aunque pasen años y años, ten la certeza que yo no te olvidaré…
Sean cuales sean los años que tenga, ten la certeza que yo siempre te esperaré.
Si la muerte no obra mal, yo siempre estaré aquí para ti…»
Amor crudo y real, amor dulce y abrumador. Amor de hombres que se sorprenden suspirando y con los ojos entornados. Amores no compartidos y amantes separados. Allí también hay todo esto.
El amor, presente en los proverbios africanos:
– Un amor que no es sólido, no dura.
– El amor es una enfermedad muy seria.
– Las consecuencias del amor quedan en el corazón.
– El amor produce elogios, pero también odio.
– Es mejor no encender el fuego del corazón, que querer apagarlo después.
– Tanto el amor como el odio nacen de la cerveza.
– Los buenos consejos son signos de amor.
– Quien te impide ir a la guerra es quien te quiere.
– El camino que lleva a la gente que queremos siempre es corto.
– El amor por una mujer, puede hacer de un hombre malo, un hombre bueno.
– Cuando los jóvenes se enamoran, los mayores sueñan.
– El amor y el odio son como un velo ante los ojos. Uno deja ver sólo lo bueno y el otro deja ver solo lo malo.
– Dar amistad a quien quiere amor es como dar pan a quien se muere de sed.
– La mirada amorosa pasa por encima de los defectos.
– El amor del malvado es peor que su odio.
– El sacrificio es un signo de amor.
– El corazón llega donde no llegan los pies.
– Lo que ya no ves en los ojos, puede estar en el corazón.
– La boca puede sonreír, el corazón sabe las heridas que tiene.
– El amor acorta las distancias.
– Lo quiere el corazón, activa los pies.
– Allí donde está el corazón es allí es donde están los sueños.
Pues eso. Que aquí como allí, amar es amar.
(Publicado por yaivi.blogspot.com)
Bienes Nacionales busca recuperar 3 mil metros cuadrados para proyectos sociales
Bienes Nacionales busca recuperar 3 mil metros cuadrados para proyectos sociales