10 de marzo de 2021
El Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) -organismo que se encarga de la protección del patrimonio cultural del país- decidió esta tarde la remoción lo antes posible de la estatua del general Manuel Baquedano, ubicada en la plaza que lleva su nombre en el centro de Santiago y que es el epicentro de las protestas que comenzaron en octubre de 2019, debido a los constantes actos de vandalismo que lo han afectado.
El traslado de la escultura, construida en bronce y que preside la rotonda desde 1928, será, por ahora, solo para restauración, informó el CMN.
Los detalles los definirá la secretaría técnica del organismo.
La talla rinde honores a Manuel Baquedano González (1826-1897), militar y político que fue presidente provisional del país entre el 29 y el 31 de agosto de 1891 y comandante en jefe del Ejército durante la Guerra del Pacífico (1879-1884), que enfrentó a Chile contra Bolivia y Perú.
En su base, el monumento acoge la tumba donde yacen los restos del «Soldado Desconocido de la Patria», encontrado en el campo de batalla.
Cabe recordar que el viernes, un grupo de vándalos apiló neumáticos en la base del monumento y los incendiaron, cubriendo la estatua del general Baquedano de llamas hasta que aproximadamente media hora después Carabineros dispersó a los presentes y con un carro lanza aguas apagó el fuego, lo que se pudo apreciar en directo por redes sociales.
El Ejército criticó con dureza a los autores de la quema, tildandolos de «cobardes desadaptados» y «antichilenos», y reiteró su llamado para que el monumento fuera trasladado a otro lugar, mientras que el Consejo de Defensa del Estado (CDE) presentó una querella contra quienes resulten responsables por el delito de incendio calificado.
El episodio más reciente de vandalismo contra la estatua ocurrió el lunes, en el marco de la marcha del Día Internacional de la Mujer. La manifestación transcurrió en un ambiente familiar y festivo hasta las 18:00 horas, cuando la policía militarizada irrumpió con gases lacrimógenos y carros lanza aguas luego de que un grupo de encapuchados tratase de cortar las patas del caballo de la escultura.
Por este último caso, la Fiscalía Metropolitana Oriente formalizó ayer martes a Andrés Sáez, imputado por el delito de daños a monumentos nacionales, en grado de consumado, ante el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago. En la audiencia, el acusado quedó con firma mensual ante la 33ª Comisaría de Ñuñoa, arraigo nacional y prohibición de participar en manifestaciones en el lugar de los hechos.
En la víspera del fallo del Consejo de Monumentos Nacionales, el intendente metropolitano, Felipe Guevara, justificó la opción de que la escultura se mantenga en el mismo lugar, afirmando que el foco debe estar puesto en los violentos: «Esto tiene que ver con la violencia, no con Baquedano. No importa qué monumento hubiese en ese lugar, seguramente estos vándalos, estos delincuentes lo dañarían igual», señaló.
Los hechos se desencadenaron cuando los fiscalizadores de la Aduana de Punta Arenas seleccionaron para revisión física el vehículo que ingresó al control fronterizo.
Los hechos se desencadenaron cuando los fiscalizadores de la Aduana de Punta Arenas seleccionaron para revisión física el vehículo que ingresó al control fronterizo.