28 de mayo de 2016
Un «quiebre definitivo» entre el diputado Gabriel Boric y la Izquierda Autónoma, el movimiento político del cual es la figura más reconocida, se oficializará dentro de las próximas horas.
Así lo afirma este sábado el diario La Tercera, dando cuenta de un distanciamiento «insalvable» entre el parlamentario por Magallanes y el colectivo que lo llevó a la presidencia de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile a fines del año 2011, tras derrotar a la comunista Camila Vallejo.
«Mañana uno de los máximos dirigentes de Izquierda Autónoma, Andrés Fielbaum, difundirá un hecho crítico para el movimiento: el quiebre definitivo con el diputado Gabriel Boric, rostro visible del colectivo», señala hoy el matutino.
De acuerdo con la versión, Fielbaum, quien sucedió al propio Boric en la presidencia de la FECh, «profundizará en las razones que llevaron al distanciamiento con el parlamentario en un medio de comunicación nacional, añadiendo una definición; seguirán haciéndose llamar Izquierda Autónoma, pese a no reconocer como un representante de sus filas al legislador por Magallanes».
La tensión al interior del colectivo se hizo pública a través de las redes sociales durante los últimos días, luego de que algunos de sus representantes -el mismo Fielbaum, los sociólogos Carlos Ruiz y Víctor Orellana y los ex dirigentes estudiantiles Valentina Saavedra y Sebastián Aylwin- concurrieran a una reunión con la ministra Adriana Delpiano el 20 de mayo, en visperas de la cuenta pública de la Presidenta Michelle Bachelet.
El encuentro fue criticado por una facción de la IA a través de una declaración pública que Boric suscribió y que provocó una extensa respuesta de Fielbaum, en la que apuntó directamente al parlamentario y su sector -derrotado en recientes elecciones internas- por no respetar las decisiones colectivas.
Las fuentes consultadas por La Tercera indican, no obstante, que «los puentes» con Boric «ya venían cortados desde hace meses».
cooperativa.cl
Los hechos se desencadenaron cuando los fiscalizadores de la Aduana de Punta Arenas seleccionaron para revisión física el vehículo que ingresó al control fronterizo.
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