12 de septiembre de 2025
LAS TRES MUJERES QUE LIDERAN LAS INICIATIVAS SOSTENIBLES DE UN HOTEL EN EL CORAZÓN DEL PARQUE NACIONAL TORRES DEL PAINE
Hotel Las Torres ha desarrollado durante los últimos años una estrategia de gestión de residuos que ha permitido la integración de su restaurante con el bar y su huerta.

Durante la última temporada en Hotel Las Torres, la gestión de residuos orgánicos comparado al último periodo se incrementó en un 29.6%, un aumento que responde a una estrategia integrada para coordinar distintas áreas con un solo fin: reducir la huella de carbono del hotel al mínimo posible y abrazar la economía circular.
Esta estrategia conversa con las diversas áreas de producción gastronómica del hotel: restaurante, bar y huerta, dinamizando una serie de procesos donde se sigue una propuesta de “desde la huerta a la mesa y de la mesa a la huerta”.
Catalina Rojas, ingeniera agrícola y encargada de la huerta biointensiva de Hotel Las Torres, sector ubicado a unos metros de este recinto, ha liderado la producción de frutas, verduras y hierbas libres de químicos o pesticidas. Bajo su coordinación, durante la última temporada, ha promovido la ejecución de diversas iniciativas.
Rojas comenta que la huerta se rige bajo el principio de “ser el principal gestor de residuos orgánicos de la operación, permitiéndonos reducir la huella que se genera por el turismo del área, acompañado de una producción hortofrutícola sostenible que demuestra que es posible generar alimentos incluso en lugares tan extremos como la Patagonia”.
Durante la última temporada, la huerta de Hotel Las Torres logró la producción de 2.676,7 kg. de compost fino, propuesta que se extendió a residuos orgánicos no compostables a corto y mediano plazo, donde se han procesado 2.074 kilos de elementos como ramas, corteza y huesos, dándole uso en camas altas y cobertura de suelo.
Estos procesos van acompañados del incremento de la diversidad en especies y variedades de cultivos, más de 50, entregando además un aumento de 290 kilos de producción hortofrutícola (18%) con respecto a la temporada anterior.
Actualmente, la huerta biointensiva de Hotel Las Torres está pensando en nuevas iniciativas tales como la elaboración de una bio-fábrica que permita potenciar la fertilidad de los suelos y optimizar los recursos del lugar, aumentar la diversidad y cantidad de propuesta hortofrutícola para las cocinas del hotel, permitiendo trabajar una propuesta gastronómica más interesante con especies y variedades de cultivo fuera de lo comercial. “No es necesaria la modificación genética en laboratorios porque ya existen variaciones que se dan naturalmente, como las variedades que hemos trabajado, como la albahaca limón o albahaca sagrada”, detalla Rojas.
Estos nuevos insumos disponibles desde la huerta, terminan en las preparaciones del restaurante Coirón, servicio gastronómico de Hotel Las Torres, donde ahora se cuenta con una nueva línea de iniciativas sostenibles, impulsadas por Francisca Guzmán, ingeniera en Medio Ambiente y Sustentabilidad, que junto al chef Joaquín Pitta han dado una nueva mirada a cómo gestionar los residuos orgánicos que genera la operación en sus tres cocinas: restaurante, bar y casino de personal.
Durante la última temporada, Guzmán lideró las capacitaciones del personal para hacer más eficiente el manejo e identificación de residuos reciclables y no reciclables, sistematizar los procesos operativos de segregación, y concientizar sobre temas ambientales y la importancia de este tipo de estrategias para el desarrollo de la operación.
Esto estuvo acompañado de distintas estrategias, donde se reutilizaron sacos vacíos de alimentos y pellet. Dando un segundo uso a 580 sacos para el transporte de residuos sólidos y otro tipo de materiales.
Además, se rescataron y enviaron para su reutilización los aceites usados de las cocinas para la producción de biocombustibles, logrando recuperar 1.509 litros durante la última temporada.
Otra iniciativa implementada por el equipo del Coirón fue la implementación de frascos de vidrio retornables para mermeladas de productores locales. Lo que involucró la devolución de 50 frascos para su reutilización.
Esto se suma a una serie de iniciativas que arrojaron resultados significativos durante la última temporada: se logró segregar el 21,41% del total de residuos generados para su reciclaje; se reciclaron cerca de 300 kilos de plásticos, lo que representa un aumento del 1.033% en comparación con la temporada anterior; y la generación de residuos generales disminuyó en un 45% respecto al mismo periodo.
Guzmán cuenta que este hito en marca una escalada en su interés en la sostenibilidad. “En el colegio, participé activamente en todas las iniciativas sostenibles disponibles, muchas veces siendo la única en mi curso que lo hacía. Una anécdota que me gusta recordar es que me apodaban “Panchamama”, por mi devoción a la Pachamama y mi compromiso con el planeta”, recuerda.
Hoy, Coirón mira con esperanza la creación de biomateriales, como una línea de innovación sostenible que busca transformar residuos orgánicos en materiales biodegradables y reutilizables, contribuyendo a un futuro más responsable y en sintonía con la conservación en la Patagonia.
Este impulso también se refleja en el trabajo realizado en Bar Pionero, donde Katherine Romero, ingeniera en Medio Ambiente, junto a Federico Gil, head bartender, han asumido el desafío de desarrollar una propuesta de coctelería sustentable en el corazón de Torres del Paine.
“Desde muy pequeña, siempre me ha llamado la atención el cuidado del medio ambiente. Sentía una profunda conexión con la naturaleza y una inquietud constante por entender cómo nuestras acciones impactan en los ecosistemas. Esta sensibilidad fue creciendo con los años, alimentada por mi curiosidad, el contacto con entornos naturales y la observación de problemáticas ambientales que afectan tanto a comunidades como a la biodiversidad”, relata Romero.
Con la llegada de la ingeniera en medio ambiente al bar, se fortalecieron los proyectos enfocados en la gestión de residuos, entre ellos: la segregación en origen, la creación de puntos de reciclaje, la realización de charlas de sensibilización para los distintos equipos de trabajo, y el desarrollo de estrategias para reducir la generación de residuos.
Uno de los desafíos más interesantes, cuenta, ha sido la gestión de los residuos derivados de la cerveza, un material abundante en la operación. A partir de esta oportunidad, se desarrollaron diversas estrategias de valorización, entre ellas la transformación de estos residuos en parte del proceso de elaboración de whisky y gin en el bar, así como su uso en la producción de vinagres artesanales.
Además, durante la última temporada se desarrolló un espacio propio donde se profesionalizó el reciclaje de botellas de vidrio, transformándolas en vasos reutilizables. Para llevarlo a cabo, se realizó la adquisición de maquinaria especializada, lo que permitió escalar la producción y alcanzar una media de más de 500 vasos al mes.
Actualmente, en Bar Pionero se está evaluando la posibilidad de reemplazar progresivamente toda la cristalería comercial por cristalería reciclada, producida a partir de las botellas de vidrio recuperadas.
En paralelo, el bar también ha dado un paso importante hacia la medición y gestión de su huella de carbono. Buscando identificar las principales fuentes de emisión dentro de las operaciones y avanzar en planes concretos de mitigación y compensación, alineados con estándares nacionales e internacionales.
“El objetivo es no solo reducir nuestro impacto, sino también comunicar de manera transparente nuestros avances en materia climática, integrando a todos los actores del ecosistema turístico”, explica Romero.
La gerencia de conservación, sostenibilidad y seguridad de Las Torres Patagonia, coordinada por su ONG, Las Torres Patagonia Conservancy desempeñó un rol fundamental, brindando respaldo técnico, humano y estratégico que permitió materializar estos proyectos.

Ilícito perpetrado el 16 de diciembre del año pasado, en Puerto Natales.
Ilícito perpetrado el 16 de diciembre del año pasado, en Puerto Natales.


