22 de diciembre de 2025
CONTADOR AUDITOR ADOLFO CANALES ALERTA SOBRE LA PENETRACIÓN DEL CRIMEN ORGANIZADO EN EL SECTOR PÚBLICO
Buenos días región.

El contador auditor Adolfo Canales Guentelican entregó una reflexión crítica a la ciudadanía en una columna de opinión titulada “Quién financia la delincuencia”, en la que analiza distintos casos recientes de corrupción y su vínculo con el crimen organizado, poniendo el foco en el flujo de recursos que permite su expansión.
Canales contextualiza su análisis a partir de investigaciones en curso, como la Operación “Apocalipsis”, que indaga una red de corrupción en Gendarmería con 42 funcionarios acusados de cohecho y 35 civiles formalizados por soborno, junto con allanamientos en oficinas del Ministerio de Obras Públicas por presuntos pagos irregulares. A ello suma la investigación a la Dirección General de Crédito Prendario, conocida como la “Tía Rica”, por el pago de $1.500 millones a 1.681 personas con antecedentes penales, que habrían empeñado bienes sin verificar su procedencia, situación que, a su juicio, se vincula con prácticas de lavado de activos.
En su planteamiento, el profesional sostiene que el sector público se ha vuelto permeable al avance del crimen organizado, contrastando esta realidad con la imagen histórica de Chile como uno de los países menos corruptos de la región. Advierte que hoy existe una abundante circulación de dinero en efectivo proveniente del narcotráfico, recursos que —según expone— se originan en el consumo cotidiano de drogas por parte de ciudadanos comunes.
Canales describe cómo ese poder económico se manifiesta incluso dentro de las cárceles, ejemplificando que un reo puede pagar hasta $120.000 por un kilo de huachalomo para consumir al interior de un recinto penal, como señal de control y dominio. Paralelamente, señala que los consumidores terminan deteriorando su vida personal y familiar, transformándose posteriormente en una carga para el Estado, ya sea por procesos de rehabilitación o por su participación en delitos como robos, homicidios, volcamientos y destrucción de patrimonio público.
En su análisis, el contador auditor cuestiona que el debate público se centre únicamente en levantar el secreto bancario, planteando que una herramienta más efectiva sería investigar el “gasto de vida” de las personas. En ese contexto, ejemplifica con la presencia de jóvenes que, sin una actividad laboral visible, acceden a vehículos de alto valor, mientras trabajadores formales enfrentan dificultades para pagar créditos por automóviles de menor costo.
Finalmente, Canales plantea la necesidad de fortalecer las investigaciones tributarias y policiales, utilizando información como patentes de vehículos y eventuales ventas simuladas que podrían ser indagadas por el Servicio de Impuestos Internos, resguardando la seguridad de los funcionarios. A su juicio, si bien es clave identificar a los cabecillas de las organizaciones criminales, también resulta necesario frenar el flujo de recursos que alimenta a la delincuencia, desincentivando el consumo y el enrolamiento de nuevos integrantes en estas redes ilícitas.
En compañía de ejecutivos de la empresa, estuvo con el turno que operó durante el incidente, constató la situación de los trabajadores y de la infraestructura dañada; además de visitar al trabajador de la empresa contratista que resultó con lesiones.
En compañía de ejecutivos de la empresa, estuvo con el turno que operó durante el incidente, constató la situación de los trabajadores y de la infraestructura dañada; además de visitar al trabajador de la empresa contratista que resultó con lesiones.






















































































































































































